Este fin de semana di por finalizado el servicio de bodas por este año. Año intenso y a la vez de gran satisfacción personal.
El tiempo acompañó para las previsiones que se suelen tener en estas fechas. Día radiante en el que los novios, algo inusual, llegaron antes que los invitados. Esos graditos de más hicieron que los dos jamones ibéricos de bellota estuvieran en su máxima plenitud, contribuyendo a la fusión de la grasa.
Agradecer a los comensales por su gran acogida, que dieron fin hasta la última loncha.
Eduardo Calavia.